Entrevista a Mara Mahía, a razón del confinamiento

 

Con respecto a esta cuarentena (sí, se acepta cuarentena para cuando no se refiere a un periodo de cuarenta días, lo dice la RAE, lo hemos buscado) que, el día 22, supimos que se prorrogaría 15 días más, hemos decidido contactar con los autores de nuestra editorial para saber cómo estaba siendo para ellos este confinamiento: qué piensan, qué no piensan, qué comen, cuántas veces a la semana van a hacer la compra o nada de lo anterior.

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E16: ¿Cuántos sois en casa?

MM: Pepe, mi perro, y yo. O sea, Pepe es mi perro. Somos dos.

 

E16: ¿Ese número ayuda o dificulta la estancia?

MM: A veces nos peleamos y tengo que cerrar una puerta. Pero en general ayuda bastante. Èl solo no podría estar.

 

E16: En el caso de que compartas piso/casa ¿tienes tu propio espacio en ella? O en el caso en que vivas solo ¿hay algún cuarto o parte que la dediques como despacho para crear/trabajar?

MM: Pepe tiene su espacio que es todo el piso y yo tengo un escritorio doble en el salón donde dibujo, escribo, trabajo, etc.

 

E16: ¿Están siendo productivos estos días? Ya sea en el sentido laboral o creativo.

MM: No mucho. No para mis estándares cotidianos. Normalmente soy muy productiva, pero desde que empezó esta catástrofe no hago más que auscultar las noticias una y otra vez, como si tuviera miedo de que si no miro las cifras contiuamente aumentaran los muertos. Es una locura. Me cuesta muchísimo concentrarme.

 

E16: ¿Nos volvemos más perezosos en estas circunstancias?

MM: No creo que sea pereza sino incertidumbre, ansiedad, miedo a lo desconocido. Nadie sabe qué va a suceder y hemos pasado de unos cuantos muertos a leer que han muerto 600 personas en un día, y ahora eso nos parece normal. ¿Y si las cifras continúan subiendo y ya ni nos inmutamos? La pereza terrorífica sería acostumbrarnos a esto.

 

E16: ¿Estás siguiendo la actualidad diaria? ¿A través de qué medios?

MM: Claro. Leo todo lo que puedo: El País, The Guardian, The Indpendent, el Taz, NYT, Deutschlandfunk, una radio de Berlin, The New Yorker. Lo que me parece interesante.

 

E16: ¿Cuál es (si para ti lo hay) el mejor artículo que has leído hasta ahora en lo que va de cuarentena?

MM:Puf. Difícil. Hoy leí uno que se titulaba algo así como “Cuando los médicos hacen sus testamentos”. Impresionante.

 

E16: ¿Te ha dado tiempo ya de acabar la lectura de alguna novela?

MM: No.

 

E16: ¿Qué estás leyendo actualmente?

MM: De todo. En mi banqueta-mesilla de noche, tengo los librazos de cuentos de Manuel Mata y de Juncal Baeza, que me parecen buenísimos. También tengo a Chekhov, una novela de Bruno Schulz “The Street of Cocodriles” y varios The New Yorkers que me invaden la casa todas las semanas. Eso lo voy leyendo según me apetece. Tengo la banqueta llena de libros, pero esos son los que leo ahora.

 

E16: ¿Te has enganchado a alguna serie? ¿Ha preferido revisitar los clásicos? ¿Nada de nada?

MM: A varias. A finales de febrero vi de nuevo Mad Men, que me parece una obra maestra, un prodigio. Y eso me ayudó a desconectar y a pasar un momento emocional bastante feo. Últimamente he estado mirando Years and Years, una mini serie inglesa fantástica.

 

E16: ¿Habías leído algún libro sobre pandemias?

MM: No, ni pienso. Tengo bastante con la realidad.

 

E16: ¿Es posible que, de esta que estamos viviendo, surja algún nuevo estilo literario o generación? ¿Es pronto para hablar de eso?

MM: Creo que es pronto para hablar de eso. Es impresionante como con esta pandemia de pronto la humanidad entera está escribiendo un diario. Me parece fenomenal anotar, apuntarlo todo. Yo también lo hago, pero creo que para escribir sobre algo tan enorme, que nos supera de tantas formas, hace falta tomar distancia. Por ejemplo, aún no me he puesto a escribir de verdad sobre como viví 9/11 en NYC. Estaba allí y en su momento envié crónicas a un periódico. Pero hasta ahora nunca me senté a escribir y ficcionar sobre el tema. Sé que lo haré muy pronto, lo siento dentro y creo que ya ha llegado el momento. Y con esta situación tal vez será lo mismo.

 

E16: ¿Alguna canción, disco o grupo que os acompañe en el encierro?

MM: El silencio me agrada muchísimo. Lo único bueno de esta catástrofe es que Berlín está en calma absoluta. Me gusta muchísimo escuchar el ruido del silencio.

 

E16: ¿Sales a aplaudir a las ocho de la tarde?

MM: Aquí no hemos aplaudido aún.

 

E16: ¿Qué es lo más raro que habéis visto hacer estos días?

MM: Nada en especial.

 

E16: ¿Comida que más se haya repetido en vuestro menú?

MM: Puré de patatas, pasta con atún, arroz con salmón y brocoli.

 

E16: ¿Qué es lo que más echas de menos de la normalidad?

MM: Nadar y viajar.

 

E16: ¿Qué es lo primero que harás cuando todo esto acabe?

MM: Salir a tomarme una cerveza con amigos y viajar a Galicia a ver a mi familia.

 

E16: ¿Cantas en la ducha?

MM: Hace tiempo que no lo hago.

 

E16: ¿Cuánto tiempo eres capaz de aguantar la respiración?

MM: Buceando aguanto un poco más de la mitad de una piscina de 25 metros. Creo que es poco tiempo. Fumé por demasiados años.